Prohibido Parquear

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Ing. Felipe Rios Tiusabá.

Es común encontrar mal parqueados en cada esquina, los unos se justifican indicando que están frente a su casa como si el andén y la vía estuvieran escriturados per se, los otros que lo hacen por 5 minuticos y los últimos porque en la vía realizan sus labores (venta de repuestos, reparaciones mecánicas y eléctricas exprés, entre otros).

De acuerdo al manual de señalización vial emitido por el Ministerio de Transporte se tienen señales preventivas, informativas, reglamentarias y de obra. Las primeras son las que se encargan de prevenir a los actores viales sobre posibles peligros. Las informativas permiten orientar a los viajeros y la cercanía de los sitios de interés. Las reglamentarias a la que pertenece la SR-28 (prohibido parquear) tienen la particularidad que tienen que cumplirse obligatoriamente y las de obra informan sobre el estado de la infraestructura vial.

El nivel de desacatamiento de las señales reglamentarias en las zonas urbanas se ha convertido en la norma, hay mal parqueados por todos lados. Incluso se percibe un circulo vicioso que procedo a describir: los agentes de tránsito pueden aplicar comparendo e inmovilización de los vehículos que se encuentren en lugares de prohibido parquear, normalmente los mal parqueados se ubican justo en donde esta instalada la señal reglamentaria SR 28, a la llegada de los agentes que con sus pitos aturden el ambiente, empieza la angustia de los conductores que salen corriendo de farmacias, peluquerías, droguerías y consultorios médicos, para mover el vehículo y evitar el “parte”. Los agentes adelantan sus labores escoltados con al menos una grúa cama baja que cuenta con operarios audaces para subir los vehículos en menos de 5 minutos, la calle se va despejando poco a poco, los agentes toman el registro fotográfico que justifica su loable labor y se mantienen en el sitio por quizás unos diez minutos, después de los cuales se marchan a un merecido descanso. Apenas los agentes voltean la esquina la calle se vuelve a engalanar con vehículos parqueados justo donde está ubicada la señal de prohibido parquear que ya no tiene autoridad ni importa su obligatoriedad, tan solo sirve para hacer grafitis y pegar estampas.

Es posible que el dinero invertido en señalización vial en espacios urbanos se esté malgastando, dado que no se acatan los mensajes de las marcas viales y de las señales verticales, valdría la pena revisar si dichos presupuestos se pueden reasignar en cultura ciudadana con prioridad en los más pequeños. De lo contrario el circulo vicioso de mantendrá por los siglos de los siglos.